Kabuki...la revista que no era ni normal

|

Si alguien sigue el blog (cosa que dudo), podrá comprobar como hemos tenido un visitante "nuevo" haciendo referencia a "Kabuki"....desgraciadamente para NiñoBomba, el comentario no pretendía analizar el famoso teatro japonés sino a una revistilla que se editó en "Ejpaña" a mediados de los noventa sobre cultura manga-trash en general.
Siempre pensé que era el único que la compraba porque el kiosquero me miraba con cara de "eggs" (la primera vez que la compré comprendí porqué).
Kabuki se caracterizó por articulos bizarros a cada cual peor, críticas (in)sanas, reportajes onanistas y un vocubulario "propio" (fetén, copón,...). La verdad es que me reí cantidad con ella.
Os dejo un enlce que he encontrado a un blog de uno de sus gurús, Jorge Riera:
Otro más sobre como y porqué alguien monta un blog:
PD: solo comentar que Kabuki tuvo una hermana gemela sobre cultura freak en general: Invasión. Ambas terminaron de editarse sin ninguna explicación....probablemente por temas de ventas...como siempre pasa la calidad (;p) no es amiga de la ventas.

4 visitantes locos:

Víctor dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Víctor dijo...

Tengo 30 años y en mi vida oí hablar de esa revista, así que gracias por la información..que por qué la buscaba? Si eres tan friki como pareces, conocerás "Dragon Fall", la parodia española de los 90 de Bola de Dragón, en ella se la menciona! (Concretamente en el Nr.23, te recomiendo encarecidamente la colección entera, al contrario que esta revista de marras, está de puta madre, se puede descargar fácilmente en cualquier portal de internet con solo googlearlo).

Fran dijo...

Yo tambien la compraba y hasta adopte la palabrota copón como propia, tiempo después me di cuenta de que es una alusión al santo cáliz...

Zenkaipower dijo...

Madre mía vaya locura la Kabuki. Aún tengo algunos ejemplares por casa y 21 años después aún no tengo claro si era una genialidad o basura inmunda. O si Jorge Riera es un genio incomprendido o un retrasado. La línea es demasiado fina.